Aldo Moreno Antezana, corregidor de la comunidad indígena Nueva Vida que pertenece a la Central Sécure, falleció este viernes después de haber quedado cuadraplégico tras un accidente el 19 de junio pasado en inmediaciones del poblado paceño de Yolosa.
El médico Gonzalo Poma que lo atendió en los últimos días en el hospital Arco Iris reportó la muerte del corregidor indígena que ocurrió a las 10:00 horas tras 24 días de estado crítico: "Estaba deprimido porque sabía que no volvería a caminar", declaró Poma.
El corregidor Aldo Moreno, de 34 años, es el único dirigente indígena que no pudo retornar a su territorio, dejó huérfana a una hija de 17 años, quien estaba en la columna de la IX marcha indígena junto a su madre.
De acuerdo con el reporte del Hospital, Arco Iris, Moreno dejó una deuda de un poco más de 60 mil bolivianos por el tratamiento médico que recibió en ese centro hospitalario.
Moreno, quien en los últimas semanas se convirtió en dirigente de su comunidad debido a su entrega por los demás, era considerado un activo corregidor y tenaz opositor al proyecto del gobierno de Evo Morales de construir la carretera Villa Tunari-San Ignacio de Moxos.
Moreno resultó herido en el accidente del 19 de junio en inmediaciones de Yolosa donde fallecieron dos personas y hubo 12 heridos.
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