El Ministerio de Culturas identificó la problemática de la colonialidad en la cotidianidad y a partir de ello coordina acciones en las instituciones públicas.
36 culturas, idiomas, formas de ver el mundo y formas de dar respuestas al mundo tiene el Estado Plurinacional de Bolivia.
JHONNY MOSCOSO V.
Cambio
El Tercer Taki Onqoy es el principal objetivo para este año del Ministerio de Culturas, afirmó el viceministro de Descolonización, Félix Cárdenas, en el seminario taller Derechos Culturales como Instrumentos de la Descolonización y la Despatriarcalización, que concluyó ayer en el salón auditorio del Centro de Comunicaciones de La Paz.
“El taki onqoy es la legitimación del movimiento ideológico político, espiritual y religioso ancestral que busca revalorizar, fortalecer y reactivar aquellos significados cosmovisionales simbólicos representados en todas las prácticas rituales-ceremoniales mitológicas para contribuir al fortalecimiento y consolidación de las identidades culturales plurinacionales”, señaló en su exposición.
Cárdenas precisó que el movimiento taki onqoy (que no tiene nada que ver con la traducción literal del término: enfermedad de la danza) tiene el objetivo general de contribuir a los procesos de descolonización y lucha contra el racismo con la implementación de políticas puestas en valor del status sociocultural de las ritualidades simbólicas ancestrales con estrategias como investigación, promoción y prácticas que contribuyan a la eliminación de la colonialidad.
“Hay que implementar la primera Cumbre Indígena Plurinacional del Siglo XXI con la participación de médicos naturistas, ambientalistas, ecologistas, sabias y sabios, guías espirituales y líderes indígenas, además de realizar los centros de Descolonización Cultural de Bolivia para construir una sociedad justa y armoniosa”, apuntó.
En esa misma línea, el Ministro de Culturas, Pablo César Groux, señaló que los derechos culturales —tema de su exposición— son parte de los derechos humanos, son universales, indisociables e interdependientes.
Una clara muestra es la Revolución Democrática y Cultural que comenzó desde la asunción al gobierno central por el presidente Evo Morales Ayma desde el 22 de enero de 2006.
“Es evidente que la historia ha desconocido todas aquellas expresiones de esas 36 naciones, y al desconocerlas hemos perdido la oportunidad como país de enriquecernos con cada una de ellas. Por eso, cuando este gobierno decidió fortalecer y dar paso a una revolución democrática y cultural, creó el Ministerio de Culturas, en plural, como un reconocimiento y compromiso con las 36 naciones del Estado Plurinacional”, indicó.
La jefa de la Unidad de Despatriarcalización, Elisa Vega, se refirió al patriarcado y despatriarcalización.
En cada apertura se procedió a la k’oa a cargo de amautas, y los cierres estuvieron matizados por el Teatro Albor, con la obra Las venas abiertas de América Latina.
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