sábado, 1 de junio de 2013

Urus del lago Poopó reclaman ser reconocidos con su historia milenaria

Los urus que habitan alrededor del lago Poopó reclaman ser reconocidos con su historia milenaria, sus usos y costumbres, tradiciones, vestimenta, y formas de vida.

Ayer en un coloquio dieron a conocer sus raíces, indicando que ellos son migrantes del país vecino de Perú, por el lago Titicaca y el río Desaguadero, quedándose a vivir en las orillas de los lagos y ríos.

"Todos los pueblos urus viven alrededor de los ríos, como los hermanos chipayas viven en el sector del río Lauca y los urus vivimos en las orillas del lago Poopó, y en las orillas de los ríos, siempre hemos vivido de la caza y de la pesca", indicó el presidente del Comité de los Urus del Lago Poopó, Andrés Choque.

Explicó que vivían dentro del lago mismo, en los kuros, que eran sus casas, construidas a base de totora. Aseguró que sus antepasados se caracterizaron por ser tímidos, ante los aymaras, por lo que no salían del sector, sin embargo, la necesidad de subsistencia les hizo relacionarse, muy poco, con los mismos, con el fin de conseguir otros alimentos y materiales para hacer su vestimenta.

"Nos han conquistado los aymaras, y en base al trueque, conseguíamos la lana de oveja, pues nuestra vestimenta era de pluma de parihuana, hay una especie en las orillas del lago, que llamamos Ali, tiene un especie de tela, con eso se tapaban", señaló el comunario.

El intercambio de los huevos de la parihuana con la lana, hizo que los ancestros comiencen a tejer, por ello todos saben esa labor, y hoy los urus visten ponchos, además de unos sombreros que están hechos con paja silvestre denominada chillahue, que hay en poca cantidad en el sector.

"Con el tiempo hemos tropezado con la contaminación, por eso la caza y la pesca es más reducida, también queremos dedicarnos a la agricultura, pero no nos dejan, acortándonos nuestro territorio que ocupaban nuestros ancestros. Esto está determinado en la constitución, pero no respetan", reclamó el originario.

Actualmente dijo que son 1.150 originarios, que necesitan ser reconocidos por la sociedad, para reclamar sus derechos, por ello es que marcharon hasta la sede de gobierno, para que también la población boliviana sepa que existen.

El representante del Centro de Ecología y Pueblos Andinos (CEPA), Gilberto Pauwels, como una conclusión de su exposición indicó que los urus deben conocerse primero ellos, saber quiénes son, su historia, y saber luego a dónde quieren ir o qué quieren lograr.

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