miércoles, 29 de julio de 2015

Video Pueblos de lengua Tupí en la Amazonia como los Xavante, son de origen australiano

El Sol de Pando
Dos estudios científicos realizados simultáneamente por las universidades de Copenhague, Dinamarca, y de Harvard, Estados Unidos, han establecido una sorprendente relación genética entre los llamados aborígenes de Australia, en el continente insular de Oceanía, con algunos pueblos indígenas de la Amazonia como los Xavante que habitan en el Mato Grosso brasileño.

Los hallazgos, publicados recientemente por las revistas Nature y Science, revelan que ciertos linajes de nativos americanos de la Amazonia provienen de una población más relacionada con los indígenas de Australia, Nueva Guinea e incluso de las islas de Andamán (en el golfo de Bengala en el océano Índico) que con los euroasiáticos y nativos americanos actuales. Además de los Xavante, tendrían este origen australiano los Suruí y Kariiana pertenecientes a la familia linguística Tupí.

El estudio danés —que secuenció información genómica de nativos americanos y siberianos— muestra la evidencia de un flujo genético posterior en el ADN de algunos nativos americanos similar al de las poblaciones actuales australo-melanesias y del este asiático, según detalló Eske Willerslev, director del Center for GeoGenetics y director de Investigaciones de la Universidad de Copenhague.

Dos olas migratorias de diversa rama

La nueva tesis no es incompatible con el antecedente de que los pueblos sudamericanos prehistóricos se formaron por migraciones originadas hace 23.000 años en el Ártico, en la Eurasia siberiana, para atravesar el estrecho de Bering —donde permanecieron aislados durante 8.000 años—, hasta que llegaron al actual continente americano hace 15.000 años, coincidiendo con el deshielo de los glaciares que abrió Bering como un acceso de Eurasia hacia el actual territorio norteamericano.

Posteriormente, la migración hacia la Amazonia desde Australia y otras islas de Oceanía se produjo hace aproximadamente 13.000 años.

Por tanto las poblaciones indígenas americanas tendrían dos ramas:

La primera, originada hace 15.000 años con los pueblos euroasiáticos cruzando el estrecho de Bering que conecta la Siberia con Alaska (desde donde bajaron hacia América del Sur).
La segunda rama proveniente de Australia hace 13.000 años, con poblaciones emigrantes de la Oceanía (que incluye la Polinesia, Nueva Guinea, Nueva Zelandia y Tasmania) cruzando el actual Océano Pacífico en línea recta (aunque también hay la hipótesis de que antes del deshielo de antiguos glaciares, las actuales Sudamérica y Australia formaban un sólo territorio que fue separado por la formación de un gran mar que hoy es el Pacífico aislando a ambos continentes. En esa misma época se habría formado el Salar de Uyuni, un mar inconcluso).

Los rasgos especiales de la “Población Y”

Según estudio realizado en Estados Unidos por un equipo que encabezó David Reich, profesor de Genética de la Escuela de Medicina de Harvard, las poblaciones provenientes de Australia se mezclaron con aquellos que llegaron desde el estrecho de Bering 2.000 años antes, hasta poblar la Amazonia formando una raza denominada por los científicos como “Población Y”, consonante simbólico tomado de la palabra “Ypykuéra” que en lengua Tupí significa “antepasado”.

Esta “Población Y” tiene características craneales distintas al resto de los amerindios de la temprana migración euroasiática (por ejemplo los aymaras del altiplano andino tienen un parecido casi exacto con las poblaciones tibetanas del altiplano nepalés; y éstos a su vez son distintos a los amazónicos de origen australiano). Es decir, las conocidas características nor-asiáticas de algunos grupos indígenas americanos actuales que surgieron hace 15.000 años, contrastan con algunos de los primeros esqueletos americanos que comparten rasgos con los australoasiáticos de hoy en día, formados dos mil años después de la primera oleada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario